Los británicos sí que saben (parte 1)

Reconozco que tengo debilidad por las series británicas. Prefiero su sentido del humor afilado, esa ironía, esas maneras tan formales de enfrentar las situaciones adversas o tomarse el mundo a pitorreo, indistintamente. Me encanta que las series tengan temporadas más cortas, que no se enreden y se vayan por las ramas en un bucle de capítulos de relleno. Adoro los actores británicos, son fabulosos, y todo con ese acento suena mejor.

No hay más que ver la última adaptación del detective por excelencia: Sherlock. Los dos actores principales (Benedict Cumberbatch y Martin Freeman) lo bordan y la relación de amistad se convierte casi en otro personaje de la trama. Nunca me cansaré de recomendarlo: vedlo en V. O. y os enamoraréis sin remedio. En especial, Watson gana muchísimo respecto a la voz doblada, que no es capaz de captar el sarcasmo que imprime a sus frases más lapidarias. La siguiente escena es una de mis preferidas:

John: «I’m seriously fighting an impulse to steal an ashtray… What are we doing here, Sherlock? Seriously, what?»

Sherlock: «I don’t know.»

John: «We here to see the Queen?»

*Mycroft strolls in*

Sherlock: «Oh, apparently, yes!»

*Both laugh*

Mycroft: «Just once can you two behave like grown-ups?»

John: «We solve crimes, I blog about it, and he forgets his pants so I wouldn’t hold onto too much hope.»

Si aún no habéis caído en la Freeman-manía, es porque no le habéis disfrutado bien. Dentro de poco saldrá El Hobbit, y él hará de Bilbo Bolsón. Pero si no tenéis paciencia, como yo, podéis ir haciendo tiempo con The Office. La serie original, of course, que trata de la vida en una oficina, en modo «falso documental». Es divertidísima. ¡Si hasta sale el pirata tuerto de Los Piratas del Caribe! Me pregunto por qué los americanos siempre tienen que hacer una versión de todo…

Hay veces que les sale bien, sin embargo. Por ejemplo, cuando hicieron un remake de Being Human, la historia de tres compañeros de piso que procuran adaptarse a una vida normal. Para tratarse de un vampiro, un fantasma y un hombre lobo, no les va tan mal. Los americanos consiguieron sacarle un poco más de jugo a la historia y los personajes, en mi opinión, pero tampoco es que la serie sea la monda… Para mí, la única gracia fue ver que el actor que aquí hace de hombre lobo aparece como uno de las víctimas en un caso de la segunda temporada de Sherlock. Concretamente, el del sabueso de los Baskerville. Todo queda en la familia canina 🙂

Volviendo a las series británicas imprescindibles, tengo que destacar en lugar de honor The IT Crowd. Aunque no os lo creáis, antes de The Big Bang Theory ya existía una serie cuyos protagonistas eran unos frikis de tomo y lomo, y que veían su rutina alterada ante la introducción de una mujer. Si tuviera que elegir entre las dos series, me quedaría con ésta sin dudarlo. ¿Y sabéis dónde vuelve a aparecer la actriz protagonista? Elemental, queridos lectores: en el último capítulo de la segunda temporada de Sherlock. Estos británicos sí que saben…

Si os ha gustado, habrá una segunda parte. Y si no, probablemente también.